Los boadillenses Decode lanzan “Kamikaze”: un salto sin red al corazón del pop rock
Los boadillenses Decode vuelven a la carga con su segundo larga duración, “Kamikaze”, un disco de pop rock intenso, emocional y visceral, donde cada nota respira verdad. Para la banda, hacer música no es un oficio: es una manera de sentir y de vivir. Un disco que presentarán en concierto el próximo 21 de noviembre a las 21:30 horas en la sala «El perro de la parte de atrás del coche».
Producido por Edu Molina (Hermana Furia, SCR) y grabado en Garlic Records, este nuevo trabajo destila la energía cruda y elegante que caracteriza a Decode, pero con una madurez nueva, con un sonido más afilado y una narrativa más profunda. Molina deja su sello inconfundible, envolviendo las guitarras, las voces y la furia contenida en una atmósfera cargada de emoción. El álbum fue masterizado por Pedro Viñuela, cerrando un proceso cuidado hasta el último detalle.
Un viaje emocional: del colapso a la liberación
“Kamikaze” no es solo un disco: es una experiencia emocional, una travesía entre la fragilidad y la furia, entre la rendición y la resistencia. Es un retrato del peso del mundo, del amor que quema, de la pérdida y del impulso por sobrevivir.
El título funciona como una metáfora perfecta: lanzarse sin red, con el corazón por delante, aun sabiendo que el impacto puede doler. Todo el álbum vibra en esa tensión entre el impulso y el abismo.
Canción a canción
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El mundo sobre mí
El peso del colapso. Expectativas, juicios, ansiedad. Es el punto cero del viaje: el momento en que todo empieza a romperse. -
Kamikaze
El corazón del disco. Amor adictivo, peligroso y embriagante. “Contigo es lanzarse sin la red.” -
Arde
Pasión y fuego. El deseo que consume y libera, el vértigo de sentir demasiado. -
Forajido
Rabia y revancha. Un western emocional donde la protagonista reclama su poder. -
Todo se apaga
Una elegía íntima: la muerte simbólica de una parte de uno mismo. “Es mi funeral.” -
Es cruel
El amor tóxico se vuelve mito. Ironía y lucidez en una canción que muerde con una sonrisa. -
Figuras de papel
El pasado que duele. Una mirada a la infancia y a los vacíos que nos construyen. -
Mi muralla
La defensa después del daño. “No hay dios que pueda entrar en mi alma.” -
No puedes saber
Vulnerabilidad y máscaras. La confesión más íntima, elegante y contenida. -
Hasta que amanezca
Catarsis. Liberación. La noche como forma de resistencia. Bailar sola y seguir viva.
Un salto emocional al vacío
A lo largo de diez canciones, “Kamikaze” cuenta una historia de supervivencia emocional. Desde la asfixia inicial hasta el grito final, Decode explora la ansiedad, la adicción emocional, el duelo y la reconstrucción.
Musicalmente, el disco se mueve entre el rock alternativo y el pop más visceral, con una producción moderna que mantiene la fuerza de la banda sin perder sensibilidad. Cada tema es una batalla interna, un reflejo de esa lucha entre el caos y la catarsis.
El viaje comienza con el colapso —El mundo sobre mí— y termina con la liberación —Hasta que amanezca—, cerrando el círculo con una energía que no se apaga, sino que renace en movimiento.
Decode: vivir al borde
Con “Kamikaze”, Decode se consolida como una de las bandas más sinceras y poderosas de la nueva escena pop rock. Este álbum no pide permiso ni perdón: se lanza al vacío, con el corazón como única brújula.
“Kamikaze” no es solo un título.
Es una manera de sentir.